En Irán, los productores agrícolas locales tienen la intención de aumentar significativamente el ritmo de producción de productos como las aceitunas en un futuro muy cercano.
Estamos hablando de un aumento en los indicadores desde marzo de este año hasta marzo de 2020 (el año islámico actual).
El Ministerio de Agricultura local señala que está previsto aumentar los volúmenes de producción a ciento veinte mil toneladas, que es un tercio más que los indicadores actuales.
No será superfluo notar que ahora Irán está considerando seriamente no solo la posibilidad de aumentar el volumen de producción de aceitunas, sino también aumentar las capacidades de procesamiento de estos productos. Por lo tanto, los representantes locales del complejo agroindustrial esperan reducir el volumen de los suministros extranjeros de aceite de oliva a Irán.
Cabe señalar que hoy en Irán, cuarenta y dos empresas que producen aceite a partir de materias primas de oliva funcionan a plena capacidad. Mediante esfuerzos conjuntos, los empleados de estas plantas logran suministrar alrededor de noventa y mil toneladas al mercado local.
Esto proporciona el setenta por ciento de las necesidades iraníes de aceite de oliva. Los treinta restantes están compuestos por importaciones.
Sin embargo, en los próximos dos años, los agricultores iraníes ampliarán el territorio para el cultivo de aceitunas hasta quince mil hectáreas. Para mayor claridad, debe tenerse en cuenta que el indicador actual del área con plantaciones de olivos en Irán es de noventa y dos mil hectáreas.