Los agricultores de todo el mundo, que tienen un gran arsenal de fertilizantes, los gastan sin pensar, causando un gran daño al medio ambiente. Los nuevos fertilizantes inteligentes reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que es similar a eliminar más de 1 millón de automóviles de la faz de la tierra.
Los fertilizantes hacen posible que los agricultores reciban cosechas generosas y alimenten a la creciente población mundial, pero esto causa un daño irreparable al medio ambiente. Uno de los problemas es el uso excesivo del apósito superior: a menudo se rocían abundantemente o se dispersan en vastas áreas.
En las últimas décadas, los científicos han inventado fertilizantes que tienen una liberación controlada. En lugar de los gránulos habituales, estos fertilizantes se colocan en cápsulas que controlan su entrada en el suelo. Las plantas los absorben gradualmente, en lugar de hacerlo en un solo paso.
Las cápsulas con fertilizantes se pueden configurar para que liberen sustancias en lotes, utilizando un cierto intervalo, que depende de varios factores: humedad, temperatura y acidez. Cuando se utiliza el mapeo de la tierra, esto reduce significativamente el uso de fertilizantes, lo cual es importante para los agricultores y los ecosistemas.
Según los científicos de la Universidad de Michigan, el uso de fertilizantes inteligentes y el mapeo del suelo reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero en 6,8 millones de toneladas por año, lo que equivale a eliminar 1,5 millones de automóviles de las carreteras.